ya acabó su novela

¡Cuando falla burócrata le ROBA al Perú!

¡Cuando falla burócrata le ROBA al Perú!

Publicado: hace 12 horas


Informe

Señal de Alerta-Herbert Mujica Rojas

29-7-2025

¡Cuando falla burócrata le ROBA al Perú!


Sus yerros son graves, pasan -casi siempre- desapercibidos, no obstante el pueblo, vía sus tributos, le pagan mensualmente y vive con relativa tranquilidad no pocas veces metiendo la pata todos los días.

¡Cuando falla el burócrata en cualquier dependencia del Estado y en todos los gobiernos, le ROBA al Perú!

Carecemos, entre una larguísima y añeja lista de orfandades, de un culto al sagrado dinero del contribuyente. El que está arriba, lo usa mal. El que está en la administración, no se preocupa en conservarlo. Dilapidar es una constante y hay que llamarlo por su nombre: ¡vicio criminal!

Burócratas que desde el Estado pueden hacer papilla presupuestos, partidas, desperdiciando los bienes que paga el contribuyente, a lo más reciben sanciones administrativas, se cubren un tiempo y retornan con fuerza renovada, insolente y, sobre todo, impune, a puestos de la misma o mayor responsabilidad. Se confina su yerro a papeleo, al olvido y a la complicidad de quienes conocen el baile exaccionador.

Los clubes electorales, alias partidos políticos, se han encargado de entrenar termitas especializadas en meter la uña, las manos y toda clase de mecanismos que les provean de dinero de origen ilícito.

Los resultados no pueden ser peores: contratos tramposos, ladrones a los que nunca se castiga, abogángsteres que les cobran al Estado ¡la defensa de los malhechores! y, en suma, forados que hacen temblar cualquier nave en este mar de corrupción.

Con el político –o al animal que por costumbre, se llama así en Perú- sucede algo peor. Claros epígonos de grandes empresas o portaestandartes de grupos de interés fabrican leyes y dispositivos que velan por sus pagantes. Ciertamente no se olvidan de cubrir bien sus credenciales y para ello cuentan con prensa adicta –y pagada- para el disimulo de sus contrabandos y fechorías.

¿Y quién paga los platos rotos?

El politólogo, a las derechas y de controvertidas tesis, chileno, Axel Kaiser, formuló una sentencia muy interesante:

“Y es que en el mercado el coste de las malas decisiones lo asume la persona que tomó la decisión, mientras que en el Estado lo asume el contribuyente, es decir, otras personas, a las cuales el burócrata o político no responde”.

El burócrata responde y tiene obligaciones morales y administrativas con el buen e impecable manejo de los recursos que provienen de los contribuyentes. Es decir, no está exento, en modo alguno del escrutinio y examen riguroso del control ciudadano. ¿Existe ese control ciudadano?

¿Puede el político musitar cuanto se le venga en gana, mentir a raudales, estafar la fe de los peruanos, cuasi regalar grandes porciones del Perú y de sus recursos renovables en concesiones o contratos de nula transparencia, sin tener el castigo adecuado a su felonía intragable? Dirán que todo depende del cristal con se evalúe a estos personajes.

¡No hay que ser un mago para señalar con nombre y apellido a los políticos que negocian suciamente en grandes contratos con nombre y apellido al país desde hace 205 años! De bisabuelos, tatarabuenos hay nietos, nietos de nietos, generaciones que han hecho de sus vidas verguenzas impunes porque NO han tenido una pizca de amor por el país, su gente y desarrollo inclusivo con justicia social y pan con libertad!

Burócrata que mal negocie o favorezca con leyes que se tuerzan en pro de minúsculas minorías, deberá ser denunciado, separado y expulsado, vitaliciamente, de la función pública. Sus bienes directos y en manos de tesfarros, confiscados y puestos sus nombres con foto y descripción en todas partes. Cuando un burócrata falla, le ROBA al Perú.

El político que a título de supuestos desarrollos que no son tales, obsequia a cambio de pingues coimas, al Perú, traiciona a la Patria y merece su fulminación integral para seguir medrando de lo que paga el Estado.

¿Es necesario un examen especial para identificar a los criminales? Me temo que rondan desde hace casi 205 años alrededor de la función pública y han hecho de su supervivencia un vergonzoso ejercicio que anemiza los dineros del pueblo.

¿Un próximo Congreso elevará las penas a los infractores? ¡Pamplinas, dirán los réprobos porque ellos son los que cortan el jamón aquí!

¿Suscita esperanza el nuevo Legislativo? Muchas dudas y han sido cuatro años torpes, plenos en torpezas, desaguisados ilegales, confusiones adrede. Todo indica que el año que aún resta, será insuficiente como para ¡siquiera! ensayar correctivos.

Perú debe desprenderse de los malos burócratas y entrenar nuevos y limpios, aunque eso signifique la fumigación masiva que equivale a la continuación del gran asalto que es cada gobierno que llega y que perdona con cinismo, al que se va.

Cuando aprendamos a castigar a los rateros, no pasaremos por la vergüenza de tener 4 ó 5 ex presidentes juzgados por ladrones. Y el que cobardemente se suicidó para huir de lo que se le venía, no es ejemplo de nada ni mártir como huachafamente exclaman los integrantes de su jauría supérstite.

El pueblo es más sabio que todos los sabios. ¡Por eso, NO votará por quienes generan sospechas gigantescas de falta de honestidad! Que lo nieguen cuanto quieran, pero nunca han podido explicar sus boyantes economías de olor fétido.


Escrito por

herbertmujicarojas

¿Será lícito describirse uno mismo? Al servicio y consagración de las causas populares. Nada hay más importante que procurar la victoria de los ideales que pasan por un Perú libre, justo y culto.


Publicado en

herbertmujicarojas

Just another Lamula.pe weblog